
En CSIRT 360 realizamos un seguimiento constante del panorama de amenazas cibernéticas en Bolivia, basándonos en datos recopilados desde múltiples fuentes abiertas de inteligencia de amenazas como Kaspersky, Check Point, Fortinet y otros servicios globales de ciberseguridad. Estos indicadores permiten obtener una visión consolidada de la actividad maliciosa detectada en el país, y ayudan a identificar patrones, picos de actividad y posibles campañas dirigidas que podrían afectar tanto a entidades públicas como privadas.
En este artículo presentamos tres indicadores clave de ciberseguridad correspondientes al periodo julio 2024 – abril 2025:
1. Ataques de Explotación de Vulnerabilidades
Este indicador refleja los intentos de explotar vulnerabilidades conocidas en sistemas y aplicaciones. Durante el periodo analizado:

Este indicador refleja los intentos de explotar vulnerabilidades conocidas en sistemas y aplicaciones. Durante el periodo analizado:
Se observa un pico crítico en agosto y septiembre de 2024, con más de 1.200 ataques detectados.
A partir de diciembre, los valores caen por debajo del umbral crítico de 983 eventos, lo que puede atribuirse a mejores prácticas de parcheo o una baja temporal en campañas activas.
No obstante, el promedio se mantiene elevado, indicando que los atacantes siguen enfocándose en brechas técnicas no corregidas.
2. Ataques de Ransomware
El ransomware sigue siendo una de las amenazas más disruptivas:

3. Ataques e Intentos de Intrusión (IDS)
El monitoreo de tráfico malicioso mediante sistemas IDS revela lo siguiente:

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Una actividad masiva en agosto de 2024, con más de 500.000 intentos de intrusión.
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La tendencia muestra una reducción progresiva desde enero de 2025, descendiendo a 155.400 eventos en abril.
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Aun así, las cifras siguen siendo altas, lo cual evidencia intentos persistentes de reconocimiento y acceso no autorizado.
Estos indicadores reflejan un panorama en el que Bolivia no es ajena a las amenazas globales en ciberseguridad. Aunque se observan mejoras en la mitigación de ciertos vectores de ataque, la persistencia de campañas automatizadas y dirigidas obliga a mantener una postura proactiva, colaborativa y basada en inteligencia de amenazas.
Desde CSIRT 360 continuaremos publicando análisis periódicos que ayuden a las organizaciones bolivianas a fortalecer sus capacidades defensivas y a construir una cultura de seguridad digital resiliente.